El Museo de Bellas Artes Ramón Gómez Cornet, alberga por
un tiempo una condensación de la amplia producción
contemporánea de Amalia Martínez Gramajo,
exhibiendo sus intereses plásticos e históricos, dónde integra
sus experiencias con la arqueología santiagueña.
Sin descuidar su historia, escribiéndola se resignican conceptos
identitarios, produciendo nuevos modelos de interpretación de
lo contemporáneo. Todas las disciplinas se vuelven actuales
bajo su mano y su mirada certera. Algunos títulos:
“Seres del monte”; “Rompecabezas Baetón”; “Retratos del
Monte”; “Conversando con mi niña interior”; “El tabique del
abuelo”; “Vida y Muerte”; “En la piel”; y sus series:
“Juegos arqueológicos”; “Máscaras ancestrales”.
Una de las operaciones más difíciles es hablar del pasado en
formato contemporáneo.
Se logra por secuencias, capas y vivencias del presente, en
donde asoman las certezas propias vividas. La historia vista
como la acumulación de capas afectivas y efectivas; nos
atraviesa y nos conforma, en lo personal y en lo comunitario.
Es bienvenida esta posibilidad que nos brinda la actividad
artística al seguir señalando: “lo que el tiempo deja de hacer”.
Rescatando sucesos, dirige nuestra atención en un desafío que
la artista lleva consigo naturalmente, proponiéndonos
internarnos en lo que la práctica suele brindarnos, llegando a
ver como una prolongación de su piel cada formato elegido.
Fotografía, Pintura, Escultura, Arte Textil, Arte Digital; como
también sus Intervenciones dentro del hábitat diario natural,
donde hallamos troncos recolectados e intervenidos junto a
objetos de metal reciclados.
Somos historia y en cada capa de ella surgen en la práctica,
símbolos y señales visibles de las varias expresiones de un
mismo sentimiento hacia Santiago del Estero, su origen, su
tierra y su lugar, presentes en esta nueva exposición de la
artista.
Su actividad múltiple y apasionada en cada formato es una
constante de su producción, que no se aleja ni se distrae de
su entorno, llevándonos a posar nuestra mirada en la misma
dirección. Su pintura es un estallido de formas y colores con
diseños propios; que convierte en poesía visual. Sus formatos
diversos invitan a un recorrido puntual con cada propuesta,
con cada intención.
En sus obras advertimos el sentimiento profundo hacia rasgos
folclóricos que, con acciones diversas contemporáneas, la
artista hace convivir permanentemente, con un amplio
conocimiento intelectual ejercitado a diario en su trabajo
profesional.
Su contemporaneidad se advierte dentro de ese saber
respetuoso con el cual presenta la historia en la iconografía
de sus obras.
NORA DOBARRO
Artista Visual y Curadora independiente